Ya estamos casi terminando la semana y para que disfruten un poco mas de sus labores les dejo tal cual la pequeña anécdota de un blog enviada por Sandra:
«Trabajo en una compañía de seguros de vida ubicada en un edificio muy concurrido, mi puesto de trabajo me obliga a estar al frente de la empresa, es decir, soy la primera persona que ve el cliente al llegar, ademas de los clientes, todas las personas que pasan a diario voltean a ver las instalaciones porque las paredes son de vidrio, así que yo solía disfrutar, en momentos de ocio, ver pasear personas, en su mayoría mujeres, directos a la escuela de estética que queda al lado, pero aun mas disfrutaba cuando desfilaba un chico en especial, el hombre perfecto, buena sonrisa, ropa elegante y costosa y muy buena presencia.
En cada ocasión cuando caminaba frente a mi trabajo, ya me sabía su rutina, me peinaba, tomaba mi maquillaje y hasta me metía una faja para lucir un poco mas delgada, soy muy gordita!!! y la verdad llegué a sentir que cuando él pasaba me correspondía, saludaba, guiñaba un ojo y me sonreía, adicional que en dos oportunidades entró a preguntar por los servicios y por la ubicación del cafetín del lugar, cuando era muy obvio.
Un día «mágico» entró y me preguntó con su porte de príncipe cabe destacar:
– Hola preciosa, si te invito a un lugar , ¿Irías?-
No lo podía creer, primera vez en 25 años que un hombre con ese target me invitaba a algo, me puse tan nerviosa que respondí:
– SII !!! SII !!! ahorita estoy trabajando pero salgo a las 5PM por si me quieres esperar-
El chico con su cara seductora soltó una gran carcajada y me dice:
– Tranquila no es para hoy, es para el jueves, y no es lo que piensas, solo te he estado observando y quería entregarte una invitación – sacando de su hermosa chaqueta una postal- es para que asistas a mi evento, soy distribuidor de productos de belleza y haremos una demostración ese día y seria bueno que nos conocieras quizás te interese alguno…-
Me limité a responder de la pena, creo que lo único que pensé fue : TRAGAME TIERRA!!!
y bueno, así fue mi anécdota que mas bien yo diría LA GRAN VERGÜENZA que me tocó vivir, entendí que solo me seducía con la mirada quizás para obtener una venta, que mas da!! así son los vendedores, en los siguientes días no se me ocurrió observar los vidrios ni por un instante, si paseó de nuevo o no ,nunca mas lo vi.
No puedo dejar de imaginarme la cara de Sandra con este chasco, lo que podemos aprender de ello es que no todo lo que brilla es oro, a su manera, quizás si es un buen chico pero definitivamente no estaba en el mismo plano que ella. Como dicen por ahí el tiempo de uno no es el otro. ¿Ustedes que opinan?
Anécdotas en un Blog 